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Última Actualización: 28/03/2024
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Manuel Arias
Guerrero de la Independencia

      Manuel Arias nació en Humahuaca en el año 1785, en el seno de una poderosa familia de hacendados. Su padre fue oficial del ejército realista. La Finca de San Andrés, perteneciente a su familia, se extendía desde el este de Humahuaca hasta Orán.
      En 1814, a comienzos de la Guerra Gaucha, formo una milicia propia en territorios de su hacienda para combatir a los realistas. Tiempo después comenzó a luchar bajo las órdenes de Güemes y fue nombrado coronel. Se destacó en el combate de Yavi  (junio de 1814) junto a otras fuerzas gauchas. El Coronel Arias pronto sobresalió como el mejor oficial de la guerra gaucha, ocupándose de la defensa de Humahuaca (constantemente invadida por lo realistas) como así también de las regiones de Orán, San Vicente y Santa Victoria. Su estrategia residía en el hostigamiento de la retaguardia de los ejércitos realistas, como así también en cortar sus líneas de comunicación y abastecimiento. Pero en muchas ocasiones atacó en batallas abiertas ganando posiciones y obligando a los realistas a retirarse. 
      En 1817 Arias y sus milicias gauchas cumpliron un rol fundamental en la defensa del territorio jujeño durante la gran invasión realista comandada por La Serna. Luego de una serie de combates en Orán, el coronel Arias se dirigió hasta Humahuaca, por aquel entonces ocupada por los realistas, infringiendo una dura derrota a las fuerzas de Mariquegui, que en marzo de ese año debieron retirarse. Durante una nueva invasión realista a Jujuy al mando de Olañeta, en agosto de ese mismo año, Arias ejerció una constante y agresiva presión sobre los realistas, presentando batalla en Uquía, Humahuaca, Huacalera y Tilcara. Tiempo después el general realista Tomás de Iriarte relataría las penurias de su ejército cuando llegó en ayuda de Olañeta y se encontró con que:
“…la situación física y moral de aquella tropa era la más deplorable; un fuerte destacamento de la división de vanguardia asediaba a Olañeta de día y de noche, cortándole los víveres; este destacamento lo comandaba el valiente coronel Arias; dos días antes de nuestra llegada, tuvieron un encuentro en que los gauchos reportaron la ventaja y Olañeta estuvo a punto de caer prisionero […] carecían de alimentos necesarios y las municiones eran escasísimas; estaban flacos y extenuados y el desaliento se había difundido en todas las clases; si tardábamos dos días más en llegar se habrían visto precisados en capitular” (Sánchez de Bustamante, 1995).              
      En esta cita encontramos una viva descripción de la guerra en Jujuy y también una prueba de la efectividad de la guerra gaucha. Tiempo después, las fuerzas realistas debieron abandonar sus posiciones y retroceder hasta el Alto Perú.
      Hasta 1820, Arias seguiría al mando de la defensa de Humahuaca y Orán. Pero en aquel año tuvo un duro enfrentamiento con Güemes: una comisión especial lo acusó de tramar una conspiración contra su comandante en jefe, dándole la pena de muerte. No se sabe a ciencia cierta si Arias conspiraba contra el caudillo salteño. Lo que parece probable es que se lo haya acusado por el hecho de que sus amistades salteñas pertenecían al partido opositor a Güemes. De todas formas, Güemes conmutó su pena y mandó a Arias al destierro en Tucumán. A partir de allí se dio un abierto encono entre ambos.
      En Tucumán, Arias fue bien recibido por el Caudillo Bernabé de Araoz (también enemigo de Güemes), quien lo designó comandante de sus tropas de infantería. Hacia 1820, Arias derrotó a las tropas salteñas en la batalla de Rincón de Marlopa, para luego expulsar a Saravia, otro destacado caudillo bajo las órdenes de Güemes, de Catamarca. Y participó de las batallas de Acequiones y Trancas.   
      Tras la muerte de Güemes, Arias volvió a Jujuy donde gozó de la protección del Gobernador Juan Ignacio Gorriti, quien le otorgó el mando político y militar de la Quebrada y La Puna.
En Junio de 1822, cuando regresaba a su estancia en San Andrés, fue asesinado por esbirros de sus enemigos políticos. (G. L.)

 

Más información sobre este tema en:

http://www.diccionariojujuy.gov.ar/
SNCHEZ DE BUSTAMANTE, T. 1995.
BIDONDO, E A. 1980.

Para citar este artículo:

"Manuel Arias" - © Jujuy en línea - 2024